La mayoría de los portuenses cree que aparecerán más casos de corrupción urbanística

LAVOZDIGITAL/Cádiz* : El retrato sociológico de los ciudadanos de El Puerto de Santa María habla de pesimismo, de algo parecido a la resignación. El estudio realizado por Ikerfel incluye una pregunta que resume esa sensación, la de un futuro complejo y, al parecer, inevitable. La interrogación que arroja ese resultado es: «¿Cree usted que aparecerán nuevos casos de corrupción urbanística en El Puerto de Santa María?». Ni siquiera uno de cada cuatro residentes preguntados tienen la percepción de que esos escándalos pasarán, que ya son cosa del pasado y que espera un futuro algo más sereno. Solo el 22,1% lo piensa. En cambio, los pesimistas, los que creen que aún tendrán que presenciar más acontecimientos de este tipo, relacionados con construcción ilegal, recalificaciones de suelo y uso irregular de terrenos, suman el 71,3%, prácticamente tres cuartas partes de todos los que responden.
El último palo
Esa es la amarga resaca de desconfianza que deja una imagen vista en El Puerto este mismo año. El pasado invierno, sin ir más allá. Agentes de Policía de paisano cargan cajas repletas de documentación extraídas de oficinas municipales. En este caso, se vieron en las oficinas de Urbanismo del Ayuntamiento portuense.

En aquella operación resultaron detenidos el ex edil de Urbanismo durante la etapa de Independientes Portuenses (IP), Juan Carlos Rodríguez; el actual jefe de licencias urbanísticas del Consistorio, Fernando Jiménez Fornell; su compañera sentimental, Milagros Trigo y la socia de ésta en el estudio de arquitectura TEC, Isabel Ruiz.

La escena, además, con otros detalles, con protagonistas distintos, con grados de gravedad que pueden parecer menores o mayores, no era nueva. Desde 2006, sobre todo, se suceden las denuncias ante la Fiscalía de Cádiz y las investigaciones, por presuntos delitos urbanísticos en suelo portuense. La gran mayoría afectan a la etapa de gobierno de Independientes Portuenses en el Ayuntamiento, que abarca 15 años.

La mayoría de los casos está 'sub iudice'. La presunción de inocencia es una norma inviolable, incuestionable en cualquier democracia. Hasta que un juez o un jurado no condenan, todo el mundo es inocente.

Las imputaciones y las detenciones no son más que trámites que conviene no convertir en penas paralelas por adelantado.

Pero la teoría democrática y legal no tiene que ver con las sensaciones de la sociedad. La portuense teme por la reiteración de estos sucesos.

Del 71,3% de vecinos que cree que estos sucesos tendrán más episodios en los próximos meses o años, los más descreídos y desconfiados son los más jóvenes, a los que se le supone una mayor inocencia, una mayor fuerza para tratar de cambiar las cosas.

Entre los encuestados de menos de 25 años, el porcentaje de los que creen que habrá más episodios de corrupción urbanística sube hasta el 81,4%. Si la franja de edad que se analiza es la que va de 25 a 34 años, la sensación aún es peor. El 92,1% de los preguntados da por hecho que las escenas se reproducirán.

La fe de los mayores

Para mayor sorpresa, el grupo que más optimismo aporta a la percepción social de El Puerto de Santa María es el de los mayores, del que cabe esperar menos inocencia e ilusión. De todas las franjas de edad, la que va más allá de los 64 años es la única que está equilibrada. El 55,9% de los encuestados cree que los casos de corrupción urbanística se reproducirán. Casi el 40% (una décima menos, exactamente) confía en que no volverán a reproducirse. Es el mayor porcentaje de todas las edad es y de la división por sexos. Nadie confía más en la mejoría que los ancianos portuenses. En este caso, habrá que pensar también que son sabios por experiencia.


* La Voz Digital - 12.05.11
Foto: El Puerto de Santa María (Cádiz), ayuntamiento - wikipedia.org

0 comentarios :