Por todo ello, los representantes de Arca manifestaron ayer, ante el inmueble que comenzaba a ser pasto de la piqueta interiormente, su "indignación por el menosprecio al patrimonio en pleno siglo XXI", que supone permitir la demolición de este inmueble situado en la esquina de la avenida Argentina con la calle Aníbal, pese a que la suspensión de la licencia de demolición ordenada por el Consell no finalizaba hasta el próximo día 10 de agosto, según la entidad conservacionista.
De esta forma, la barriada de Santa Catalina perderá uno de sus edificios más emblemáticos y visibles, ya que está ubicado en uno de los accesos al barrio, tal como señalan desde Arca, "y será sustituido por otro de nueva planta que destruirá el conjunto armónico actual".
Lamentan que ni los actuales gestores municipales ni los anteriores hayan querido hacer "ningún esfuerzo ni tan solo para salvar la fachada".
Fuentes municipales indicaron que la suspensión de la licencia de demolición, ordenada por el Consell el 10 de mayo de 2010, fue levantada por esta Administración el pasado 29 de junio, en una resolución en la que, además, se insta al Ayuntamiento a incluir el edificio en el Catálogo municipal. Un acuerdo que no fue tenido en cuenta por la comisión del Centro Histórico del pasado día 7 de julio, que dictaminó que no debía incluirse en el Catálogo, con el voto en contra de los representantes de las entidades.
La cuenta atrás para la desaparición de este inmueble se inicia hace una década, cuando después de una larga tramitación del expediente de ruina y múltiples informes contradictorios, tanto municipales como privados, el proceso finaliza en una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Balears, que declara que el inmueble se encuentra en situación de "ruina económica".
"Nadie defendió el valor patrimonial del edificio", se queja Àngels Fermoselle, para quien, si se hubiera puesto en una balanza el activo del valor histórico del inmueble, "la diferencia entre el valor del edificio y el coste de su rehabilitación hubiera sido positiva a favor de la primera variable y no hubiera dado lugar a la ruina económica".
Tras la sentencia del Alto Tribunal la gerencia de Urbanismo de Cort concedió la licencia de demolición el 25 de junio del año pasado. En febrero de este año se ha presentado la licencia de nueva edificación, que no fue informada favorablemente y se le señalaron una serie de deficiencias técnicas a subsanar.
* Diario de Mallorca - 20.07.12
Foto: El inmueble fue ayer vallado y los obreros comenzaron a derribar tabiques interiores.- diariomallorca
3 comentarios :
Vergonya cavallers, vergonya!!!! D'aquí 100 anys feran volums de fotos sobre Palma, del com era al com és i es nostres nets se queixaran de tot el patrimoni perdut, més quan estam en ple segle XXI i se nota que la mentalitat en temes de patrimoni és sa mateixa que fa 100 anys (un exemple és el convent de Sant Domingo, esbucat amb alevosia per simple interessos urbanístics). Supòs que construiran un edifici modern, que no vol dir guapo, com el que hi ha devora, destroçant novament la fesonomia d'aquest antic barri mariner...Vergonya.
diariomallorca
El edificio en cuestión no debe considerarse emblemático solamente por si mismo, hay que valorar el conjunto que forma la manzana completa. Es la única manzana que mantiene la fisionomía original de edificios de poca altura. Además, lo grave es que según el PGOU actual, las contrucciones de la línea de Avenida Argentina puede construirse hasta 5 plantas de altura, y he ahí lo jugoso de la jugada. No esperemos que hagan un edificio pequeñito y cuco a la entrada de Santa Catalina, van a realizar una mole modernísima y de primeras calidades (como ya tenemos varios ejemplos en el barrio)
diariomallorca
Efectivamente es triste ver como estos edificios, que durante tanto tiempo han contribuído a dar al barrio de Sta. Catalina su carácter y personalidad, vayan a ser derribados... Pero sin querer ser abogado del diablo, porque el diablo no tiene defensa venga de la derecha o de la izquierda, a mi se me revuelven las entrañas cada vez que veo en toda Mallorca edificios con tanto valor arquitectónico y patrimonial en un estado lamentable, cuando no de evidente abandono. Si queremos conservar patrimonio hagámoslo de verdad, y no protegiendo edificios con el único propósito de evitar su demolición, sino condicionando ésta a la restauración o adecuación a ciertas normas. Y por cierto, creo que es un tema independiente de quien nos gobierne, unos no han hecho mucho más que otros al respecto...
diariodemallorca
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